Las empresas auxiliares de construcción recortan plantilla ante la caída de ventas
La crisis del sector inmobiliario ha provocado que los negocios de suministro hayan reducido la facturación hasta en un 30 o 40 % en lo que va de año
20-06-2008
Maquinaria de construcción expuesta en la Feria Internacional de Canarias.
La crisis del sector inmobiliario ha provocado que los negocios de suministro hayan reducido la facturación hasta en un 30 o 40 % en lo que va de año
20-06-2008
Maquinaria de construcción expuesta en la Feria Internacional de Canarias.
LA PROVINCIA / DLP
M. P. PÉREZ / J. MONTESDEOCA - LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. La crisis del sector inmobiliario en Canarias ha empezado a hacer mella en las empresas auxiliares de la construcción y en los importadores de materiales, que aseguran que las ventas y los servicios a terceros han caído entre un 30 y un 40 % en los últimos meses, lo que les está obligando a reducir plantilla y a renegociar sus deudas con los bancos para evitar la suspensión de pagos. Es el caso, entre otras, de la ferretería Barber, Maquinarias Paco o Cementeras Industriales.La empresa Maquinarias Paco ha despedido a unos treinta empleados y mantiene, de momento, a 100 trabajadores entre Gran Canaria, Fuerteventura y Tenerife, pero también está negociando con varias entidades financieras el pago de su deuda. Pero no sólo las empresas auxiliares están sintiendo los efectos de la recesión económica. Las grandes compañías de la construcción de la provincia de Las Palmas alertaron ayer de que el sector "sufre una parálisis total". Además, no ven buenas expectativas a corto plazo para mantener los puestos de trabajo y, por ello, han comenzado a reducir sus plantillas.Pero no sólo las constructoras reducen empleo, sino todas las pequeñas y medianas empresas que viven de esta actividad. "La construcción era como un barco que llevaba una velocidad de crucero y de repente se ha parado en seco", señaló ayer el presidente de una de las grandes empresas del sector.Los constructores consideraron que 2009 será el año de la "gran hecatombe" en esta actividad, pues todavía hay empresas que "escapan" con algunas obras o promociones de viviendas. Debido al retraso en los planeamientos insulares y a que la mayoría de los ayuntamientos no han aprobado los planes generales, los constructores dicen que es imposible pensar que en una mejoría en el próximo año. Al respecto, la patronal del sector calcula que los efectos de la recesión durarán tres años, el tiempo que se necesita para vender las viviendas que ya están en el mercado y las que se están construyendo. "Si no hay obras públicas y tampoco privadas, difícilmente se podrán mantener los negocios", avisó uno de los grandes empresarios, quien precisó que el Gobierno canario hace un discurso sobre el empleo para los canarios y después aplica otro en los concursos públicos, de tal forma que las grandes empresas de fuera se llevan las obras, y después acaban haciéndolas las subcontratas, que deben hacer un desembolso hasta que la gran empresa les pague.
M. P. PÉREZ / J. MONTESDEOCA - LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. La crisis del sector inmobiliario en Canarias ha empezado a hacer mella en las empresas auxiliares de la construcción y en los importadores de materiales, que aseguran que las ventas y los servicios a terceros han caído entre un 30 y un 40 % en los últimos meses, lo que les está obligando a reducir plantilla y a renegociar sus deudas con los bancos para evitar la suspensión de pagos. Es el caso, entre otras, de la ferretería Barber, Maquinarias Paco o Cementeras Industriales.La empresa Maquinarias Paco ha despedido a unos treinta empleados y mantiene, de momento, a 100 trabajadores entre Gran Canaria, Fuerteventura y Tenerife, pero también está negociando con varias entidades financieras el pago de su deuda. Pero no sólo las empresas auxiliares están sintiendo los efectos de la recesión económica. Las grandes compañías de la construcción de la provincia de Las Palmas alertaron ayer de que el sector "sufre una parálisis total". Además, no ven buenas expectativas a corto plazo para mantener los puestos de trabajo y, por ello, han comenzado a reducir sus plantillas.Pero no sólo las constructoras reducen empleo, sino todas las pequeñas y medianas empresas que viven de esta actividad. "La construcción era como un barco que llevaba una velocidad de crucero y de repente se ha parado en seco", señaló ayer el presidente de una de las grandes empresas del sector.Los constructores consideraron que 2009 será el año de la "gran hecatombe" en esta actividad, pues todavía hay empresas que "escapan" con algunas obras o promociones de viviendas. Debido al retraso en los planeamientos insulares y a que la mayoría de los ayuntamientos no han aprobado los planes generales, los constructores dicen que es imposible pensar que en una mejoría en el próximo año. Al respecto, la patronal del sector calcula que los efectos de la recesión durarán tres años, el tiempo que se necesita para vender las viviendas que ya están en el mercado y las que se están construyendo. "Si no hay obras públicas y tampoco privadas, difícilmente se podrán mantener los negocios", avisó uno de los grandes empresarios, quien precisó que el Gobierno canario hace un discurso sobre el empleo para los canarios y después aplica otro en los concursos públicos, de tal forma que las grandes empresas de fuera se llevan las obras, y después acaban haciéndolas las subcontratas, que deben hacer un desembolso hasta que la gran empresa les pague.
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