EL ARCHIPIÉLAGO ENCABEZA LA OLEADA DE NUEVOS EMIGRANTES

CANARIAS SEMANAL

Con el estallido de la Crisis, el espejismo de prosperidad alimentado en España durante los últimos años ha dado paso a la más cruda realidad. Tras el anunciado estallido de la burbuja inmobiliaria, la economía española se muestra incapaz de recolocar a los más de 5.300.000 parados registrados en el último informe de la EPA. Y para un elevado porcentaje de ellos la única solución vuelve a ser la más tradicional en este país: emigrar

El número de demandantes de empleo para trabajar fuera de España se ha duplicado desde el inicio de la Crisis. Más de 300.000 personas ya han decidido emigrar y, una vez más, los canarios son quienes están haciéndolo en mayor proporción. Un estudio de Adecco recientemente publicado constata que el número de españoles que buscan empleo en el extranjero ha llegado a representar el 10% de los demandantes que se acercan hasta las oficinas de esa empresa. Y, según el Instituto Nacional de Estadística, en 2011 se registró por primera vez un saldo migratorio negativo. A lo largo de esos doce meses 508.000 personas abandonaron España, mientras que solo llegaron a instalarse 458.000.

Desde principios de 2008 hasta el cierre de 2011 el número de españoles mayores de edad residentes en el extranjero creció un 25,6%, superando los 1,5 millones de personas. Por comunidades autónomas, el estudio de Adecco indica que Canarias es la comunidad que ha experimentado un mayor incremento de expatriados a otros países, con un 51,5%; seguida de Baleares, 44,4%, y La Rioja, 39,4%.

EUROPA COMO DESTINO PRINCIPAL

En cuanto a los destinos elegidos por estos emigrantes, el citado estudio apunta que el 50% de los que deciden marcharse elige el continente europeo. Alemania, país que en los años 60 se convirtió en uno de los mayores receptores de la emigración española, vuelve a ser hoy uno de los destinos principales, como también Reino Unido o Noruega. Otras naciones de Europa del Este, como Polonia y República Checa, también están atrayendo a arquitectos o ingenieros de obras públicas sin posibilidades de realización profesional en España. Finalmente, destacan como destino de los emigrantes países latinoamericanos como Argentina, Chile, México y Brasil.

LAS ISLAS PIERDEN EL 50% DE SUS MÉDICOS RECIEN LICENCIADOS

Entre los nuevos emigrantes españoles destaca el perfil de los jóvenes profesionales. Entre enero y septiembre del año pasado 50.000 graduados de todo el Estado hicieron las maletas para abandonar el país. Un 37% más que en 2010. Una tendencia que se manifiesta de manera especialmente intensa en las Islas, como consecuencia de su modelo económico centrado en el "monocultivo" del turismo, que no ofrece posibilidades de inserción a los numerosos licenciados y diplomados de las dos universidades canarias.

Pero también las políticas de ajuste neoliberal aplicadas por el Ejecutivo regional de CC y PSOE en el Gasto Social están contribuyendo a acelerar esta pérdida de profesionales formados con dinero público. Según los últimos datos publicados por el Consejo General de Colegios profesionales de España, un total de 116 médicos de Canarias, casi la mitad de los universitarios que se licencian al año en las dos facultades de las Islas, decidieron irse al extranjero en busca de trabajo el año pasado.

"Los recortes que el Gobierno autónomo aplicó en el presupuesto del año pasado dieron lugar a esta situación, y aún no se han visto todos sus efectos", confirma Levy Cabrera, coordinador en Tenerife del programa de formación para la prueba Médico Interno Residente (MIR).

En España, concluir la carrera de Medicina y realizar la especialización conlleva unos 11 años de estudios. En el caso de las dos universidades canarias, esto supone que solo pueden titularse al año, como máximo un total de 300 alumnos. Pero, pese a la carencia de estos profesionales, el Ejecutivo autónomo ha disminuido el número de plazas para el Servicio Canario de Salud. “No se han creado puestos de trabajo - denuncia Levy Cabrera -. Cada vez hay más titulados y, en cinco o diez años, la crisis y la escasez de plazas del MIR darán lugar al caos".