Nuevamente, desde nuestra organización nos vemos en la obligación de realizar una llamada a la reflexión en puertas de un nuevo proceso electoral, que marcará la evolución futura de los derechos e intereses laborales titularidad del colectivo de trabajador@s de la empresa Salcai-Utinsa, S.A.

Por responsabilidad con los compromisos asumidos por esta organización, en respuesta al apoyo y respaldo recibido por el conjunto de trabajador@s, que aun no siendo afiliad@s nos brindaron su confianza, y en definitiva, por el interés general de la plantilla, el CATT concurre a las inminentes elecciones sindicales con el objetivo de continuar con la incansable lucha iniciada años atrás, para preservar los espacios de libertad y reivindicación necesarios para garantizar el respeto del conjunto de derechos laborales que tenemos reconocidos legal y convencionalmente, y cuyo cumplimiento exige de este colectivo una vigilancia y supervisión constantes para contrarrestar los incesantes “DESCUIDOS Y DEVANEOS” en que incurren la empresa y otras organizaciones sindicales en cuanto a su aplicación e interpretación.

Esa labor es asumida por el CATT sin apartar la vista de la realidad socio-económica actual, lo que nos ha obligado a “echar el freno” en determinadas reivindicaciones laborales para preservar el principio de estabilidad en el empleo, pero NUNCA CON RENUNCIA DE DERECHOS PARA EL COLECTIVO DE TRABAJADOR@S, sino mero retraso en la aplicación y ejecución del conjunto de derechos laborales reconocidos.

A fecha actual, pese al sacrificio realizado por la parte social, sólo se ha obtenido la callada empresarial por respuesta, sin manifestación alguna de voluntad tendente a restaurar entre las partes el equilibrio cedido, por lo que ha llegado el momento de reactivar esos derechos e intereses legítimos del colectivo de trabajador@s, siempre desde la coherencia y con absoluta LEALTAD y TRANSPARENCIA, labor compleja para la que esta organización precisa de la colaboración de todo el colectivo, cuyo interés y bienestar son la causa incondicional del esfuerzo de nuestro quehacer diario.

En definitiva, como toda relación reciproca esta organización ofrece como aval al colectivo de trabajador@s, su entrega, esfuerzo y compromiso, poniendo a su disposición el adecuado asesoramiento jurídico, debiendo recordar los siguientes logros obtenidos:

Movilidad en Vacío, Actualización Salarial, Complemento Personal Garantizado, Incentivo de Asistencia Continuada…

sin olvidar los conseguidos en la defensa de derechos individuales,

y simplemente espera:

que el compromiso, la autenticidad, la transparencia y la tenacidad

guíen vuestra elección en las próximas votaciones previstas para el 02.07.15, renovando el apoyo a esta organización sindical que trabaja por y para el colectivo de trabajador@s de la empresa Salcai-Utinsa, S.A.

“EL catt LA FUERZA DE LA RAZÓN”

miércoles, 18 de enero de 2012

¡VUELVETE A ALEMANIA, PEPE!

"El catt con la FUERZA DE LA RAZÓN"

LA CRISIS CONVIERTE A ESPAÑA NUEVAMENTE EN UN PAÍS DE EMIGRANTES

CANARIAS SEMANAL

Con 5.400.000 millones de desempleados y un paro juvenil del 50%, casi nadie recuerda ya en España las promesas de prosperidad indefinida y el desigual crecimiento económico que los medios del establishment bautizaron como "milagro español". Los tiempos del "desarrollo" basado en la actividad especulativa y la construcción desaforada quedaron definitivamente atrás, dando paso a la cruda realidad. España no iba nada "bien" por más que se empeñara en sostenerlo José María Aznar - al menos para la mayoría -. Ni estuvo tampoco cerca de entrar en la "Champions League" de las economías europeas, tal y como se atrevió a asegurar un eufórico Zapatero durante su primer mandato.

Junto a la burbuja inmobiliaria estalló también el espejismo y concluyó, de manera abrupta, un periodo excepcional en la historia del país. Desde la década de los 90 y hasta el comienzo de la Crisis España fue un país receptor de millones de inmigrantes. Fundamentalmente latinoamericanos y africanos que llegaban en busca del trabajo y las oportunidades que no encontraban en sus respectivas naciones, saqueadas previamente por multinacionales estadounidenses y europeas como Repsol YPF, Endesa, Iberdrola, etc. Y la sensación del “nuevo rico” no dejó de reactivar en ciertos sectores un trasnochado orgullo con reminiscencias imperiales. Repentinamente, muchos olvidaron que sus padres y abuelos habían huido de la miseria en Alemania, Venezuela o Cuba y se sintieron legitimados para mirar por encima del hombro a "sudacas", "negros" o europeos "del Este".

Ahora, sin embargo, las tornas han vuelto a cambiar radicalmente. Según el Instituto Nacional de Estadística, en 2011 se registró por primera vez un saldo migratorio negativo. A lo largo de esos doce meses 508.000 personas abandonaron España, mientras que solo llegaron a instalarse 458.000 personas.

Entre los nuevos emigrantes españoles destaca, además, el perfil de los jóvenes profesionales. Entre enero y septiembre del año pasado 50.000 graduados hicieron las maletas para abandonar el país. Un 37% más que en 2010. El único camino que estas nuevas generaciones parecen vislumbrar para labrarse un futuro es el mismo que tuvieron que andar sus antepasados. Según un estudio de la consultora PeopleMatters, en 2007 un 46% de los jóvenes universitarios españoles se manifestaba dispuesto a emigrar. En 2011 eran prácticamente todos los que contemplaban esa posibilidad: un 98%. En este momento el destino preferente para el emigrante español es la Unión Europea, aunque Estados Unidos yLatinoamérica están ganando terreno. Sólo en el primer trimestre del pasado 2011 el número de españoles que emigró a Alemania se disparó hasta un 49% con respecto al mismo periodo del 2010. Un total de 2.400 trabajadores decidió instalarse en el país centroeuropeo. Una tendencia migratoria que continúa acentuándose, ante la falta de perspectivas laborales en el Estado español.