"El catt con la FUERZA DE LA RAZÓN"
CANARIAS: EMERGENCIA SOCIAL SIN PERSPECTIVAS
CANARIAS SEMANAL
Los datos de la última Encuesta de Población Activa publicada el viernes 26 de enero han venido a confirmar la gravedad de la situación económica que atraviesa el conjunto del Estado español y, de manera muy particular, el Archipiélago canario. Durante el pasado 2011 se destruyeron en todo el territorio estatal la astronómica cifra de 600.000 empleos, elevándose el número de personas en paro a los 5.300.000 y la tasa de desempleo al 22,8%. Los principales medios de comunicación de todo el mundo se hicieron eco de este catastrófico índice de desocupación. El caso de Canarias, sin embargo, merece una mención especial. En las Islas, la tasa de desempleo es más de 8 puntos superior a la media estatal, y quedó fijada al término del pasado año en el 30,93%. Un máximo histórico que sólo es superado por Andalucía. En ese periodo, el incremento del paro en las Islas fue del 8,75%. El número de trabajadores sin empleo en Canarias asciende ya a 341.900.
DESEMPLEO DE LARGA DURACIÓN Y EXCLUSIÓN SOCIAL
El panorama laboral del Archipiélago se acaba de dibujar con las tonalidades más oscuras, cuando se considera el incremento continuado de los parados de larga duración. De las 341.900 personas sin trabajo antes mencionadas, ya son 102.100 las que llevan buscando infructuosamente un empleo desde hace más de dos años. El 29,9% del total.
DESEMPLEO DE LARGA DURACIÓN Y EXCLUSIÓN SOCIAL
El panorama laboral del Archipiélago se acaba de dibujar con las tonalidades más oscuras, cuando se considera el incremento continuado de los parados de larga duración. De las 341.900 personas sin trabajo antes mencionadas, ya son 102.100 las que llevan buscando infructuosamente un empleo desde hace más de dos años. El 29,9% del total.
La cantidad de estos parados de larga duración no cesa de crecer. Hoy son 16.100 más que al cierre del tercer trimestre de 2011 y 30.900 más que hace un año. De acuerdo a los datos de la EPA, la posibilidad de reintegrarse al mundo laboral disminuye de manera directamente proporcional al tiempo que se ha permanecido desempleado. Caer en la categoría de parado de larga duración implica, por tanto, encontrarse en la peligrosa zona de riesgo de exclusión social. Una situación que amenaza también a uno de seis hogares canarios, que actualmente tiene a todos sus miembros en paro.
"SOBRAN" LA MITAD DE LOS JÓVENES CANARIOS
La imposibilidad de la economía canaria para permitir el desarrollo de la población isleña se pone igualmente de manifiesto al considerar la tasa de desempleo de los jóvenes. En este momento, uno de cada dos menores de 25 años en disposición y con el deseo de trabajar se encuentra en el paro. La tasa exacta, del 49,11%, se elevó en este grupo de edad en seis décimas en los últimos tres meses y en ocho en todo el año 2011. Según reconocían recientemente voceros del Gobierno regional, un porcentaje significativo de estos jóvenes, en la mayoría de los casos con formación superior o técnica media, está optando ya por la emigración como única solución a la falta de perspectivas en las Islas.
SIN SALIDA POSIBLE DENTRO DE UN MODELO AGOTADO
El Gobierno regional de CC y PSOE no ha dudado en calificar este desolador panorama como de "emergencia social". La consejera canaria de Empleo, Margarita Ramos, solicitó de forma urgente una reunión con la ministra del ramo, Fátima Báñez, para "analizar la situación del paro" y demandar “un marco singular de apoyo al mantenimiento y la creación de empleo”en Canarias.
Las perspectivas sobre las probables actuaciones de los ejecutivos regional y central, no obstante, no pueden resultar menor alentadoras. Por una parte, el director del Servicio Canario de Empleo (SCE), Manuel León, reconoció de manera implícita la incapacidad del primero, al anunciar cuáles son las "medidas efectivas" contra el paro en las que está trabajando el Gobierno de Canarias. Se trata -dijo- “de un paquete de medidas dotado de 55 millones de euros con los que prevén crear 6.000 contratos temporales de realización de obras y servicios". Las peticiones que la consejera de Empleo anunció que realizará en Madrid tampoco permiten ser más optimistas. Además de solicitar nuevos fondos para implementar “parches” sociales de tan poca incidencia como los mencionados, uno de los caballos de batalla del Gobierno autónomo, para la “reactivación” económica de las Islas, es la solicitud a Madrid de que mantenga las bonificaciones a las tasas aéreas a las aerolíneas que vuelan al Archipiélago.
Y es que los gobernantes canarios no barajan, ni como posibilidad remota, el estimular otros sectores económicos diferentes al Turismo, ni poner en marcha planes para la tantas veces prometida “diversificación económica” del Archipiélago. “El Turismo es el único sector capaz de ayudar a reconducir la tendencia del paro” -aseguraban esta misma semana, en línea con los expresado por sus representantes políticos, desde la Confederación Canaria de Empresarios. La realidad, sin embargo, niega tajantemente esta posibilidad. La máxima ocupación y el crecimiento del Turismo en los últimos meses ha coincidido, por el contrario, con el récord histórico de desempleo en Canarias. Algo que pone crudamente de manifiesto que nos hallamos ante el agotamiento histórico de un modelo insostenible que ha generado, no obstante, enormes beneficios a la burguesía isleña y los empresarios instalados en las islas.
"SOBRAN" LA MITAD DE LOS JÓVENES CANARIOS
La imposibilidad de la economía canaria para permitir el desarrollo de la población isleña se pone igualmente de manifiesto al considerar la tasa de desempleo de los jóvenes. En este momento, uno de cada dos menores de 25 años en disposición y con el deseo de trabajar se encuentra en el paro. La tasa exacta, del 49,11%, se elevó en este grupo de edad en seis décimas en los últimos tres meses y en ocho en todo el año 2011. Según reconocían recientemente voceros del Gobierno regional, un porcentaje significativo de estos jóvenes, en la mayoría de los casos con formación superior o técnica media, está optando ya por la emigración como única solución a la falta de perspectivas en las Islas.
SIN SALIDA POSIBLE DENTRO DE UN MODELO AGOTADO
El Gobierno regional de CC y PSOE no ha dudado en calificar este desolador panorama como de "emergencia social". La consejera canaria de Empleo, Margarita Ramos, solicitó de forma urgente una reunión con la ministra del ramo, Fátima Báñez, para "analizar la situación del paro" y demandar “un marco singular de apoyo al mantenimiento y la creación de empleo”en Canarias.
Las perspectivas sobre las probables actuaciones de los ejecutivos regional y central, no obstante, no pueden resultar menor alentadoras. Por una parte, el director del Servicio Canario de Empleo (SCE), Manuel León, reconoció de manera implícita la incapacidad del primero, al anunciar cuáles son las "medidas efectivas" contra el paro en las que está trabajando el Gobierno de Canarias. Se trata -dijo- “de un paquete de medidas dotado de 55 millones de euros con los que prevén crear 6.000 contratos temporales de realización de obras y servicios". Las peticiones que la consejera de Empleo anunció que realizará en Madrid tampoco permiten ser más optimistas. Además de solicitar nuevos fondos para implementar “parches” sociales de tan poca incidencia como los mencionados, uno de los caballos de batalla del Gobierno autónomo, para la “reactivación” económica de las Islas, es la solicitud a Madrid de que mantenga las bonificaciones a las tasas aéreas a las aerolíneas que vuelan al Archipiélago.
Y es que los gobernantes canarios no barajan, ni como posibilidad remota, el estimular otros sectores económicos diferentes al Turismo, ni poner en marcha planes para la tantas veces prometida “diversificación económica” del Archipiélago. “El Turismo es el único sector capaz de ayudar a reconducir la tendencia del paro” -aseguraban esta misma semana, en línea con los expresado por sus representantes políticos, desde la Confederación Canaria de Empresarios. La realidad, sin embargo, niega tajantemente esta posibilidad. La máxima ocupación y el crecimiento del Turismo en los últimos meses ha coincidido, por el contrario, con el récord histórico de desempleo en Canarias. Algo que pone crudamente de manifiesto que nos hallamos ante el agotamiento histórico de un modelo insostenible que ha generado, no obstante, enormes beneficios a la burguesía isleña y los empresarios instalados en las islas.
Los datos, se analicen como se analicen, resultan incontrovertibles. Ningún crecimiento de la actividad turística, por importante que éste pueda llegar a ser, podrá absorber a los cerca de 350.000 parados que hoy acumula el Archipiélago, tras el estallido de la especulativa burbuja inmobiliaria. Sólo cabe preguntarse, por tanto, cómo reaccionará el pueblo canario ante este negro callejón sin salida. ¿Recurriendo una vez más, como en siglos pasados, a la emigración masiva u obligando a los responsables del desaguisado a que cojan ellos la maleta?
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