En la mañana del pasado lunes, Canarias Semanal publicaba un reportaje titulado "Elena Mateo: 'lideresa' estudiantil y política con sueldo de 26.500", referido a la cabeza de lista de la Asociación Canaria de Estudiantes (ACE) en la candidatura de este grupo al claustro de la Universidad de La Laguna.
En dicho artículo, se informaba de que Mateo es, en efecto, una política profesional del PSC-PSOE que cobra 26.543,29 euros del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, como Secretaria de Grupo. En el contenido del reportaje se hacía público, asimismo, que en la candidatura encabezada por esta militante del PSOE confluían también miembros del Partido Popular - el número tres de la lista Kevin Cabrera- y de Coalición Canaria. Como es sabido, los tres partidos se han alternado y coaligado en las instituciones del Archipiélago durante más de treinta años. En el reportaje publicado se aportaban datos previamente contrastados y, en lo concerniente al formidable sueldo de Elena Mateo, extraídos directamente de un Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
Pese a la pulcritud con la que trató de redactarse la noticia, en la tarde del mismo lunes la redacción de Canarias Semanal recibía una amenazante misiva de la Asociación Canaria de Estudiantes, en la que se nos instaba a "retirar la información emitida". En caso contrario - nos advertían desde ACE - "tomaremos las medidas legales pertinentes".
Puntualizamos, a continuación, algunos extremos respecto a lo manifestado en el mensaje de quienes pretenden ser representantes de los alumnos en el claustro universitario.
En relación a la información publicada sobre su cabeza de lista, el grupo estudiantil institucional aludido mantiene que: "La situación laboral de la compañera y portavoz de ACE,Elena Mateo Morales... es totalmente ajena a la actividad de ACE y a la política estudiantil". La ocupación profesional o militancia política de cualquier compañero de ACE -añaden - no es impedimento para ejercer la función de miembro claustral de la ULL".
No son actualmente pocos los ciudadanos - entre ellos muchos estudiantes- que rechazan a los integrantes de los partidos institucionales por considerarlos responsables directos de las políticas de recortes y empobrecimiento que sufre la sociedad canaria. Las dos universidades de las Islas han sido víctimas, igualmente, de una descapitalización generalizada de lo público, cuyas consecuencias terminan pagando siempre aquellos estudiantes que disponen de menos recursos económicos. El hecho de que en una misma candidatura se presentaran miembros de partidos políticos con programas aparentemente opuestos nos pareció un dato periodísticamente relevante. Por eso lo incluímos en la narrativa del artículo.
En cualquier caso, solo a los propios estudiantes de la ULL corresponde valorar si la ocupación como política profesional - excelentemente remunerada, por cierto - de la señoritaMateo y la militancia en el PP y CC de algunos de sus compañeros de candidatura les resultan o no un impedimento a la hora de prestarles su apoyo. Sí forma parte de las funciones de este periódico digital, en cambio, informar sobre aspectos que, por las razones que fuera, se habían mantenido ocultos a la inmensa mayoría de los universitarios. Los integrantes de esta candidatura oficialista deberían tener muy claro a estas alturas que el deber de los medios de comunicación es proporcionar los datos fidedignos y la información imprescindibles para que sus lectores se encuentren en condiciones de poder decidir con plena libertad.
Más adelante, el amenazante comunicado de la candidatura ACE aduce, en relación con la nutrida presencia de elementos de los tres principales partidos institucionales - PP, CC y PSOE - en su lista electoral, que: "ACE, como grupo claustral de la ULL, es un grupo apolítico que solamente se dedica a trabajar por los intereses de los estudiantes de la ULL, independientemente de la ideología política que cada uno de sus miembros pudiera tener".
En la redacción de esta revista también estimamos que deben ser los estudiantes quienes juzguen si los idearios políticos son similares a una chaqueta que se puede dejar en el hall de laUniversidad para recuperarla posteriormente en las reuniones del partido. Nosotros opinamos, no obstante, que las ideologías no son nunca artilugios de "quita y pon", sino que, por el contrario, son las que determinan nuestras concepciones acerca de cómo se debe regir la sociedad, el Estado o un centro universitario. ¿Podrá olvidar un militante del PSOE, CC oPP qué tipo de proyecto educativo defienden sus propias organizaciones? ¿Opinan todos de la misma forma? Si reflejamos en nuestro reportaje la extraña y sospechosa coyunda de los tres partidos en una sola candidatura fue porque tal "experimento" no solo nos resultaba insólito, sino que parecía responder a objetivos probablemente inconfesables.
Por último, la Asociación Canaria de Estudiantes sostiene que este "medio ha hecho una intromisión ilegítima en la vida profesional de la compañera Elena Mateo y Kevin Cabrera,ofreciendo incluso información confidencial como puede ser el DNI de la citada".
Este es, acaso, el más disparatado de los "argumentos" esgrimidos por la peculiar candidatura claustral ACE para exigir nuestra "rectificación". Basta apuntar, a este respecto, que toda la información publicada en el reportaje sobre Elena Mateo Morales y sus compañeros es de carácter absolutamente público. A estas alturas de sus respectivas carreras, los integrantes de la candidatura ACE deberían saber que no existe nada menos"confidencial" que los boletines oficiales cuya finalidad es, precisamente, poner a disposición de los ciudadanos la información que precisen y son, además, una inestimable fuente para el periodismo de investigación. Huelga decir que este medio digital no tiene nada que "rectificar" ni, por supuesto, va a someterse al chantaje de quienes pretenden ejercer de pequeñostorquemadas, vulnerando el libre derecho a la información.
Creemos que el ultimátum lanzado por ACE contra Canarias Semanal contribuirá, sin duda, a despejar los interrogantes que todavía puedan tener los universitarios de la ULL respecto al auténtico sesgo ideológico del peculiar cóctel que se les está ofreciendo como candidatura.
Finalmente, en el enlace adjunto a esta página reproducimos el "órdago" recriminatorio con el que nos amenazó la candidatura claustral denominada "Asociación Canaria de Estudiantes".
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