viernes, 16 de noviembre de 2012
AUGC CANARIAS denuncia esta nefasta práctica, que quiere convertir a los guardias civiles de Tráfico en meros recaudadores, en lugar de ser los garantes de la seguridad vial en las carreteras del archipiélago.
"El catt con la FUERZA DE LA RAZÓN"
CANARIAS SEMANAL
La Comunidad Canaria ha recibido recientemente la visita del máximo responsable de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, el General Antonio Dichas. Una visita, agraciada con dietas para manutención y alojamiento, cuyo fin ha sido incentivar y animar a los agentes canarios a aumentar el número de denuncias en la comunidad.
En Las Palmas al general se le agasajó con una paella realizada en los garajes de la Comandancia y en Tenerife con la correspondiente comida para compartir con sus subordinados más afines en un restaurante. Eso sí, cobrando todos los asistentes al evento la pertinente dieta, y todo ello apenas unos días después de que los compañeros que participaron en la Vuelta Ciclista a Tenerife tuvieran que renunciar al cobro de sus dietas por falta de presupuesto.
Pero que nadie piense que esta visita del General Dichas ha sido para felicitar personalmente a los Guardias Civiles de la Agrupación de Trafico por lograr que las Islas Canarias sean una de las Comunidades Autónomas con menos fallecidos por accidente de trafico en 2011. NO, nada más alejado de la realidad. El General nos ha honrado con su visita para arengar a los mandos intermedios de Tenerife y Las Palmas a que suban los números de denuncias formuladas por los Agentes de Tráfico, todo ello bajo la velada advertencia de que si no se subían los índices de denuncias interpuestas en las Islas Canarias, los Guardias Civiles verían como su ya maltrecho sueldo se vería rebajado otra vez, proponiéndolos para la retirada del complemento de Seguridad Vial, en total unos 240 euros.
Y como dice el refrán, Dicho y Hecho. AUGC CANARIAS ha tenido conocimiento, que después de tan solemne visita, han sido ya varios los agentes a los que han “advertido” sus superiores inmediatos, de que “si persisten en lo sucesivo en el bajo rendimiento puesto de manifiesto, se procederá a realizar la pertinente propuesta, mediante resolución motivada de NO percepción de productividad e incrementos correspondientes”.
La diferencia en el reparto con los métodos antiguos del reparto a dedo es sencillo, ahora todo queda enmascarado bajo lo que la Guardia Civil llama Resumen Mensual de Actividades Individuales, RAI.
Una herramienta, que dicen, “recoge cuantitativamente la actividad desarrollada en cada unidad y en la que con la inclusión de una serie de parámetros cualitativos debidamente ponderados permite tener una valoración en conjunto de la actividad desarrollada por cada uno de los agentes”. A mayor número de multas impuestas más posibilidades tienes de cobrar los complementos y, por el contrario, cuantas menos multas se formulen a los ciudadanos más posibilidades tienes de ver reducido aún más su salario.
AUGC CANARIAS denuncia esta nefasta práctica, que quiere convertir a los guardias civiles de Tráfico en meros recaudadores, en lugar de ser los garantes de la seguridad vial en las carreteras del archipielago.
Quizás sea peligroso para la productividad de este señor y alguno de sus acólitos, que a buen seguro cobran religiosamente todos los meses, que el número de denuncias de tráfico bajasen en Tenerife un 50% y en Las Palmas un 25% (datos de Julio de 2012) y poco parece importar el trabajo que se viene desarrollando por parte de la Agrupación de Tráfico en Canarias donde año tras año desciende el número de fallecidos en accidentes de tráfico.
Tampoco parece tener en cuenta el General Antonio Dichas el índice de PARO en Canarias, superior al 33%, encontrándose entre las 5 comunidades autónomas con más desempleados de España. Este índice debería hacer reflexionar a los mandos canarios y al General: más paro=menos dinero para abonar multas, lo que se traduce en más moderación en la conducción; y, el que Canarias sea la quinta comunidad con más paro también se traduce en menos vehículos en sus carreteras a los que multar. Todo ello hace que los índices de denuncias bajen puesto que ahora los conductores no comenten las mismas infracciones que antes de la crisis, y que nos encontramos en tiempos de una austeridad como no habíamos conocido en la historia de la democracia española.
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GUARDIA CIVIL
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